Los e-combustibles son una alternativa prometedora para la descarbonización del transporte marítimo, pero su impacto a corto plazo será limitado debido a la lenta expansión de estas tecnologías. Según el último informe de la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA), es improbable que estos combustibles desempeñen un papel relevante en el sector marítimo global antes de 2030.
Análisis del potencial de los e-combustibles en transporte marítimo
El informe, titulado «Potencial de los e-combustibles para el transporte marítimo», fue elaborado por ABS y CE Delft. Es parte de una serie sobre combustibles alternativos que incluye biocombustibles, amoníaco, hidrógeno y propulsión eólica. En esta edición, el análisis se centra en los e-diésel, e-metano y e-metanol, considerados los más viables para aplicaciones marítimas, junto con el amoniaco verde y el hidrógeno.
Estos e-combustibles se producen combinando electricidad renovable con CO2 limpio no biogénico. El informe evalúa diversos aspectos como:
– Producción.
– Sostenibilidad.
– Disponibilidad.
– Indicadores tecnoeconómicos.
– Panorama normativo.
Las rutas de producción estudiadas incluyen:
– Síntesis de metanol.
– Metanación.
– Síntesis Fischer-Tropsch.
Estas tecnologías dependen de hidrógeno renovable y captura directa de aire (DAC) para obtener CO2 no biogénico. Sin embargo, el DAC aún se encuentra en etapa de demostración, limitando la viabilidad comercial de los e-combustibles. Como alternativa, el informe propone explorar la captura de carbono en agua oceánica.
El informe recomienda priorizar tecnologías maduras para la producción de e-combustibles para transporte marítimo en el corto plazo. Esto incluye:
– Electrólisis: para generar hidrógeno renovable.
– DAC: para capturar CO2 limpio.
Además, se sugiere utilizar CO2 biogénico residual, como el proveniente del biometano, para reducir costes y acelerar la producción. Sin embargo, el desarrollo de sistemas DAC debe continuar en paralelo para permitir la transición al uso de CO2 atmosférico u oceánico a largo plazo.
La sostenibilidad ambiental de e-combustibles en transporte marítimo
El último informe de la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA) destaca las limitaciones actuales en la producción y adopción de e-combustibles para la industria marítima. Aunque ofrecen ventajas potenciales para la sostenibilidad, los datos disponibles son limitados debido a su baja producción actual.
En términos de emisiones, se espera que los e-combustibles:
– Azufre: No contengan azufre.
– NOx: Reduzcan las emisiones entre un 20% y un 80%, según el tipo de e-combustible, el combustible fósil utilizado como referencia y la tecnología del motor.
– Partículas (PM): Disminuyan con el uso de e-metanol y e-metano, aunque el e-diésel genera más PM en comparación.
El informe resalta la necesidad de normas internacionales que permitan una evaluación integral de los gases de efecto invernadero (GEI) asociados con los e-combustibles. Esto incluye la comparación entre diferentes rutas de producción para analizar con precisión la huella de carbono.
El informe también advierte sobre posibles impactos ambientales y en la biodiversidad relacionados con la producción de e-combustibles. Propone:
– Ubicación: Usar grandes zonas desérticas para instalaciones de producción.
– Agua: Optar por la desalinización del agua de mar como fuente para la producción de hidrógeno.
Para alcanzar la producción a gran escala, será necesario expandir significativamente todos los componentes clave:
– Plantas de electricidad renovable.
– Electrolizadores.
– Sistemas DAC (Captura Directa de Aire).
– Plantas de síntesis de e-combustibles.
El informe identifica al DAC como el principal cuello de botella en la ampliación de la capacidad de producción de e-combustibles.
Estrategias para Acelerar la Producción
EMSA sugiere que un enfoque integral podría acelerar el desarrollo. Esto incluye:
– Proyectos conjuntos: Invertir simultáneamente en electricidad renovable, capacidad de electrólisis, síntesis de e-combustibles y DAC para asegurar un desarrollo equilibrado.
– Colaboración del sector marítimo: Mediante coinversiones y contratos de suministro con productores de e-combustibles.
Para impulsar la adopción de e-combustibles, se proponen medidas como:
– Subsidios financieros.
– Impuestos al carbono.
– Sistemas de comercio de derechos de emisión de carbono.
Estas acciones facilitarían la expansión de capacidades tecnológicas y reducirían los costes de producción, haciendo a los e-combustibles más competitivos y viables para la industria marítima.
Evaluación tecnica y económica de los e-combustibles en transporte marítimo
El análisis realizado por la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA) examina el coste total de propiedad (TCO) asociado al uso de e-combustibles en diversos tipos de embarcaciones. Los resultados indican que, si los costes de producción de los e-combustibles disminuyen y los precios de los combustibles fósiles aumentan junto con los costes del carbono, la brecha en el TCO entre ambos sistemas podría cerrarse hacia 2050.
Opciones de combustibles alternativos
Los hallazgos destacan que e-metanol, e-diésel, e-etanol y sus variantes basadas en biocombustibles, junto con el amoníaco verde, presentan los menores costes adicionales dentro del TCO. Estos combustibles son considerados alternativas viables para avanzar hacia la descarbonización del transporte marítimo.
Necesidad de Incentivos
Para fomentar su adopción, EMSA subraya la importancia de implementar medidas globales basadas en el mercado que reduzcan la disparidad de costes entre los e-combustibles y los combustibles fósiles. A medida que aumente el uso de e-combustibles, se espera una expansión en la infraestructura relacionada, como los sistemas de abastecimiento (bunkering), lo que podría generar una reducción en los precios.
Sin embargo, la competencia por la electricidad renovable en otros sectores podría influir negativamente en los costes de los e-combustibles, un factor cuya magnitud aún no se ha determinado.
Normativas y directrices
El informe señala que muchas normativas actuales para combustibles fósiles pueden ser adaptadas a los e-combustibles. No obstante, es esencial desarrollar estándares más robustos para facilitar la adopción y permitir una evaluación completa del impacto de gases de efecto invernadero (GEI) en las distintas rutas de producción.
El desarrollo adicional de las directrices de la Organización Marítima Internacional (IMO) permitiría comparar de manera justa las huellas de carbono de diferentes combustibles alternativos.
La IMO ha establecido metas ambiciosas basadas en emisiones «Well-to-Wake». El objetivo para 2030 es que al menos el 5% de la energía utilizada en el transporte marítimo internacional provenga de tecnologías, combustibles o fuentes de energía con emisiones nulas o casi nulas de GEI, con una aspiración del 10%.
Fuente: EMSA. Informe: Potencial de los e-combustibles para el transporte marítimo